Técnicas de intervención en crisis: Defusing y Debriefing
Analizan en la UdeG técnicas de intervención en crisis: Defusing y Debriefing
El CUCSH reafirma su compromiso con la formación integral y el bienestar emocional de la comunidad universitaria, impulsando el conocimiento de herramientas que fortalecen la salud mental y la empatía social.
La División de Estudios Políticos y Sociales del Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades (CUCSH) de la Universidad de Guadalajara llevó a cabo la conferencia magistral “Técnicas de intervención en crisis: Defusing y Debriefing”, impartida por el doctor Jorge Montoya Carrasquilla, médico tanatólogo y especialista en duelo. El evento fue moderado por el doctor Ricardo Fletes Corona, profesor investigador del CUCSH.
Durante su intervención, el doctor Fletes Corona destacó la importancia de abordar los efectos psicológicos y sociales que dejó la pandemia, señalando que esta “eclosionó muchos fenómenos que ya estaban presentes”, como el aumento de la violencia familiar, la depresión y los suicidios.
“Aún seguimos en tiempo de crisis. Es una crisis atenuada, pero no hemos desarrollado memoria social para tomar medidas. Vivimos en una crisis permanente: de desapariciones, de asesinatos, de suicidios”, subrayó Fletes.
Por su parte, el doctor Montoya Carrasquilla abordó la evolución de la atención sistematizada al duelo, la cual surgió a finales de los años cincuenta desde el trabajo social. Enfatizó que la raíz de muchos males se encuentra en la infancia y que mientras no se atiendan las pérdidas tempranas, ya sean por muerte, maltrato o abuso, difícilmente se reducirán los índices de sufrimiento social.
El especialista centró su exposición en las técnicas de intervención en crisis conocidas como Defusing y Debriefing, herramientas ampliamente utilizadas en contextos clínicos, hospitalarios y organizacionales para prevenir el desgaste emocional y favorecer la resiliencia.
El experto mencionó que el Defusing es una técnica de intervención breve que se aplica pocas horas después de un evento crítico. Su propósito principal es reducir la fatiga compasional, prevenir el síndrome de burnout (agotamiento laboral) y favorecer la recuperación emocional inmediata del personal que brinda servicios a otras personas como médicos, profesores, psicólogos, rescatistas o policías.
Durante el defusing se promueve un espacio de contención y escucha donde los participantes pueden expresar sus emociones, aclarar dudas sobre sus reacciones y recibir información que les ayude a normalizar su experiencia. Es una técnica preventiva que busca aliviar la carga de estrés institucional y anticipar posibles daños psicológicos.
También explicó que el Debriefing, por su parte, es una técnica más extensa y estructurada, que suele durar entre cinco y siete horas. Está dirigida a grupos o familias que han vivido una experiencia traumática o una pérdida significativa.
De acuerdo con el doctor Montoya, “toda familia en duelo se merece un debriefing”, pues este proceso permite a las personas ventilar sus emociones, normalizar lo que sienten y obtener información sobre cómo manejar su duelo de manera saludable, además, el debriefing fomenta la catarsis colectiva y el apoyo intergrupal, ayudando a los participantes a encontrar un sentido de paz y comprensión compartida.
Entre sus componentes esenciales se encuentran: Ventilación emocional: expresar libremente sentimientos y pensamientos; Normalización: comprender que las reacciones emocionales intensas son naturales ante la pérdida; e Información: brindar herramientas educativas sobre el proceso de duelo y estrategias de afrontamiento.
“Ambas técnicas tienen como objetivo descargar los afectos en un marco seguro y de contención, centrado en las experiencias de quienes enfrentan una crisis”. Estas intervenciones, explicó Montoya, deben formar parte de protocolos institucionales de atención y pueden realizarse también en modalidad virtual.
Montoya Carrasquilla subrayó que muchas personas no buscan acompañamiento tras una pérdida, creyendo que no lo necesitan, pero enfatizó la importancia de acudir con profesionales capacitados:
“Toda persona en duelo debe buscar ayuda. Un especialista en duelo no juzga, escucha y orienta; conoce el proceso y puede identificar los factores de riesgo para ofrecer estrategias adecuadas de afrontamiento.”